4 de febrero de 2009

Nevada


Por supuesto que existe Papá Noel; sólo que es imposible que una sola persona haga todo lo que hace él. Por eso el Señor ha distribuido el trabajo entre nosotros. Por es
o todo el mundo es Papá Noel. Yo lo soy. Tú lo eres. Incluso tu primo Billy Bob. Ahora ponte a dormir. Cuenta estrellas. Piensa en una cosa más apacible. Como la nieve. Siento que no llegaras a verla. Pero ahora la nieve cae por entre las estrellas.

"Una Navidad" Truman Capote

¿Por qué la nieve nos da serenidad? ¿Por qué nos gusta tanto?

2 comentarios:

María Del Rincón Yohn dijo...

A mi me gusta la nieve porque es blanda y limpia. Porque puedes jugar con ella y esquiar. Porque te roza cuando cae pero no moja mucho. Parece casi de mentira.

Raquel Cascales dijo...

La nieve tiene la ventaja de que se ve caer, pero una vez caída yace inerte. No se mueve, salvo que la estruges en tus manos para lanzarla a alguien. La nieve recién caída yace blanca, pura hasta que se derrite.

No hay nada como ver la nieve caer dentro de una habitación calentita, marca el contraste de la vida. Quizá por eso nos gusta tanto.

Copo a copo las calles se tiñen de blanco, letra a letra se escriben grandes historias. No dejes de dejarlas caer. Un saludo!